Paráfrasis I. Educación Bancaria.
Paráfrasis acerca de la educacion bancaria de Paulo Freire, con referencia en la siguiente bibliografía
Freire, Paulo. Pedagogía del oprimido. Pp. 77-101.
LA EDUCACIÓN BANCARIA
“Referirse a la realidad como algo detenido, estático, dividido y bien comportado o en su defecto hablar o disertar sobre algo completamente ajeno a la experiencia existencial de los educandos deviene, realmente, la suprema inquietud de esta educación.”
Freire considera al hombre como un ser en constante cambio, por ello, el contexto es un elemento importante a considerar, pero sobre todo que el aprendizaje que obtenga el educando sea de su propia experiencia y no sea ajeno a ésta; lo contario a la educación bancaria en el que todo es estático y el educador es el que narra sus experiencias y el educador se limita a escuchar; por esta razón Freire se contrapone a ésta y menciona que por naturaleza el hombre esta en movimiento y no se puede utilizar lo mismo para todos, sino hay que tomar en cuenta también el contexto en el que se desenvuelva.
“La narración, cuyo sujeto es el educador, conduce a los educandos a la memorización mecánica del contenido narrado. Más aún, la narración los transforma el “vasijas”, en recipientes que deben ser “llenados” por el educador. Cuando más vaya llenando los recipientes con sus “depósitos”, tanto mejor educador será. Cuanto mas se dejen “llenar” dócilmente, tanto mejor educandos serán.”
Este breve párrafo nos hace referencia a la educación tradicionalista en el que, el principal centro era el educador y los educandos no eran tomados en cuenta, simplemente eran receptores de la información transmitida por medio de la memorización sin interiorizar o hacer significativo el aprendizaje, no existían experiencias generadoras de aprendizaje, lo cual limitaba mucho al educando.
“En vez de comunicarse, el educador hace comunicados y depósitos que los educandos, meras incidencias, reciben pacientemente, memorizan y repiten. Tal es la concepción “bancaria” de la educación, en que el único margen de acción que se ofrece a los educandos es el de recibir los depósitos, guardarlos y archivarlos. Margen que solo les permite ser coleccionistas cosechadores de cosas que archivan.”
Freire denomina educación bancaria al acto de depositar en el educando información de forma memorística, sin un significado, por ello en el párrafo anterior se refiere al alumno como una vasija y el educador es el que lo llena. También la denomina bancaria porque la única acción del educando es la de recibir los depósitos.
“En la visión “bancaria” de la educación, el “saber”, el conocimiento, es una donación de aquellos que se juzgan sabios a los que juzgan ignorantes. Donación que se basa en una de las manifestaciones instrumentales de la ideología de la opresión: la absolutización de la ignorancia que constituye lo que llamamos alienación de la ignorancia, según la cual ésta se encuentra siempre en el otro.”
La educación bancaria tenía la visión de transmitir conocimientos o saberes a las personas que consideraban ignorantes y los que transmitían estos saberes eran considerados “sabios”, y estos al tener los conocimientos, tenían cierto poder ante los demás y los mantenían cegados ante la realidad que estaban viviendo, estos los hacia vivir en opresión sin poder hacer nada ante ello, porque se han encargado los que tienen el poder, de reafirmarles a cada instante que nada son sin ellos.
“En verdad, como discutiremos más adelante, la razón de ser de la educación libertadora radica en su punto inicial conciliador. La educación debe comenzar por la superación de la contradicción educador-educando. Debe fundamentarse en la conciliación de sus polos, de tal manera que ambos se hagan, simultáneamente, educadores y educandos.”
Freire consideraba un paso de suma importancia el eliminar esa línea divisoria entre educador-educando que estaba muy marcada en la educación bancaria, y para que el implementara su educación libertadora primero tenía que cambiar ese paradigma que aún en nuestros días sigue existiendo y limitando a muchas personas. Lo que Freire trababa de hacer es que tanto educador como educando se eduquen, que exista una retroalimentación entre ambos para un beneficio mutuo.
“El problema radica en que pensar auténticamente es peligroso. El extraño humanismo de esta concepción bancaria se reduce a la tentativa de hacer de los hombres su contrario: un autómata, que es la negación de su vocación ontológica de ser más.”
Freire esta en desacuerdo a la educación bancaria porque limita la naturaleza del ser humano y los que tienen en poder lo utilizan para su beneficio y no para un bien común. El ser humano por naturaleza busca más allá y al obtener algo siempre quiere más y esto lo va impulsando a su progreso, el pensar y expresar ideas para mejorar solo era tarea de los “sabios” y no de los “ignorantes”, ¿Ignorantes? Porque el hombre ha de ser ignorante, si es un ser pensante por naturaleza; al hombre lo hacen creer que es ignorante mediante la dominación de los poderosos para su conveniencia.
“Al contrario de la concepción “bancaria”, la educación problematizadora, respondiendo a la esencia del ser de la conciencia, que es su intencionalidad, niega los comunicados y da existencia a la comunicación. Se identifica con lo propio de la conciencia que es ser, siempre, conciencia de, no sólo cuando se intenciona hacia objetos, sino también cuando se vuelve sobre sí misma, en lo que Jaspers se denomina “escisión”. Escisión en la que la conciencia es conciencia de la conciencia.”
Freire no solo critica a la educación bancaria sino que propone una educación problematizadora respondiendo a las necesidades del hombre, a lo que es, mediante un dialogo mutuo en el que no existan educador y educando sino educador-educando y educando-educador, que el hombre sea critico y sea capaz de transformar su contexto, deja a un lado a aquel hombre pasivo que se limitaba a escuchar y pasa a ser un hombres activo, que esta en constante cambio y búsqueda. Todo esto se logra primeramente haciendo consciente al hombre de lo que es; la educación problematizadora sirve a la liberación, porque el hombre es libre por naturaleza y debe seguir siéndolo.